lunes, 29 de septiembre de 2014

EL GRECO Y LA PINTURA MODERNA

Ejemplo de la influencia que El Greco ejerció en Picasso para sus Señoritas de Avignón.

Solo quedan 5 días. Es la última oportunidad que tenemos de poder ver la exposición El Greco y la pintura moderna que el Museo del Prado nos ofrece. ¡Acaba este 5 de octubre!! así que ya estamos corriendo a la cola.
Doménicos Theotocópulos, nacido en Grecia, tuvo una formación pictórica muy completa bebiendo en las fuentes del Renacimiento Italiano de Tiziano y Tintoretto en su principio para luego estudiar a Miguel Angel, en Venecia. Al final de su carrera y vivendo ya en Toledo, optó por un Manierismo personal y evolucionado A ello debemos esas figuras alargadas, esa iluminación de contrastes y esos colores tan insólitos como atractivos.
Adoración de los pastores.
En la exposición podremos ver 25 obras de El Greco y 70 de Manet, Cezanne. Picasso o Pollock,
Es un homenaje  al pintor en el IV centenario de su muerte. El Greco  revolucionó el concepto que de la pintura se tenía  hasta entonces, siendo así   precursor de la pintura moderna. Sin duda se adelantó a su tiempo, como digo,  en el tratamiento del color, las formas, la perspectiva y la luz. Por esto, su influencia en los siglos XIX y XX fue decisiva para futuros artistas. Dio pie a Las Vanguardias de las que bebieron Manet, Cezanne o Picasso, pero sobre todo percibimos su influencia en el Expresionismo Centroeuropeo en obras de Becknam o Kokoschka. Del mismo modo marcó el camino a artistas surrealistas americanos como  Bacon o europeos como Giacometti o Saura
Pido perdón por haberme llegado tan tarde  esta noticia, pero si os dáis prisa...

viernes, 26 de septiembre de 2014

DESDE MI INDIGNACIÓN



En mi más de medio siglo de existencia, he vivido en mi infancia la represión del franquismo, merendando mientras hacía los deberes de Formación del Espíritu Nacional, oyendo la radio entre anuncios del Cola-Cao y la señora Francis. Era la España gris, aún con regusto a postguerra, de los incipientes años sesenta. Una década más tarde, mi juventud fue testigo de otra España,  variopinta donde, en los últimos años del dictador, los “grises” empleaban a fondo sus porras en las tiernas carnes de los estudiantes Ciudad Universitaria arriba y abajo. He sentido miedo, opresión. Pero el inconformismo nos unía a todos y nos hacía revelarnos y luchar con todas nuestras fuerzas para lograr un cambio, El Cambio definitivo que nos permitiera vivir en paz, en una sociedad justa, una sociedad mejor para nosotros y sobre todo para las generaciones venideras. Algo estaba cambiando y al fin lo logramos. Un cambio histórico. La Democracia, la ansiada libertad. Tiempos de ilusión, de cantautores, de España camisa blanca de mi esperanza, de “destape” en los quioscos y en el cine. Fue el principio de una nueva era. Durante bastantes años vivimos un bienestar relajado, tiempos prósperos donde el trabajo sobraba de tal modo que en pocos años miles de  inmigrantes venían a realizar lo que los españoles no queríamos hacer. Luego…todos lo hemos visto, a  bancos y gobiernos se les fue la olla y empezaron a repartirse el pastel, a inflar la burbuja del ladrillo más y más, a especular, a mangonear a sus anchas y a expoliar todo lo expoliable. Ahora estoy asistiendo a la época más triste de todas cuantas he vivido; los abusivos recortes en sanidad y en educación. Nos están exprimiendo hasta dejarnos secos y lo que más me preocupa es que el futuro es oscuro como un pozo sin fondo. Nunca pensé que pudiera llegar a ver algo semejante. Durante el franquismo solo había un enemigo pero ahora…son cientos de lobos que ya ni siquiera se molestan en ponerse una piel de cordero, actuando con una desfachatez y una impunidad repugnante que me ponen los pelos de punta. Nos lo han quitado todo, trabajo, derechos, salud. Han deshecho familias, provocado suicidios, dejado gente en la calle.  Han subido impuestos, congelado sueldos, impuesto castigos, humillaciones, están vaciando las cárceles de presos peligrosos, están prohibiéndolo todo, amordazándonos. NOS ESTÁN ANIQUILANDO. Solo espero  a estas alturas de mi vida tener fuerzas para luchar hasta borrar de la faz de la Tierra a estas malas bestias y ayudar a crear un nuevo orden social donde los seres humanos tengamos dignidad hagamos un futuro sostenible y perdurable que nos permita ser felices. ¿Llegará a ser posible?.

VIBRA EL SILENCIO

                            VIBRA EL SILENCIO

Un niño preguntó un día a unos músicos que si creían que él podría aprender y llegar algún día a tocar como ellos , a lo que le contestaron  que no era tarea  fácil. Varias décadas después,  el maestro Andrés Segovia dijo de aquel niño, ya hombre, ya artista, ya genio, tras oírle tocar en un concierto; “no es un músico; es un hijo de Dios y éste se complacerá en tenerle cerca cuando le llegue su hora”.
Francisco Sánchez Gómez, nacido en Algeciras en diciembre de 1947, o lo que es lo mismo Paco, el de Lucía –su madre-, moría esta mañana de un infarto.
Hoy las guitarras están de luto y lloran en un canto desgarrado la ausencia del maestro.
A él, a Paco de Lucía, le debemos la aportación a la música de algo tan importante como la fusión del flamenco con otros estilos, blues, jazz, rock… incluso con la música clásica interpretando a Falla o Albéniz. Memorable su concierto de Aranjuez.
Viajó desde joven a América y más tarde a Europa envolviendo el aire de notas virtuosas y haciendo vibrar el alma de cuantos le escuchaban.
También le debemos la inclusión del cajón como instrumento. Lo trajo de Perú en uno de sus viajes y en seguida vio sus posibilidades en el flamenco.
Es destino, a veces tan sabio, puso en su camino a Camarón y fue algo grandioso rayano en lo divino y de esta unión vieron la luz una decena de discos míticos.
Como genio y monstruo todos le conocimos y poco más podemos aportar, pero, ¿de su vida, como persona?, ¿qué sabemos?.
En público era muy tímido y parco en palabras. Claro, la guitarra hablaba por él. Pero en la intimidad era un hombre muy familiar. Amó a dos mujeres en su vida. Particularmente pienso que en algún momento   pudo sentirse “entre dos aguas” al tener que vivir entre Algeciras y Méjico o, como diría su amigo Alejandro Sanz, con “el corazón partío”, pero esto es solo una intuición. (perdón si no es así)
Tras unos años en Cuba se instaló definitivamente en Méjico, lo que él denominó como su paraíso dedicado a la par que a la música a otras actividades que le fascinaban; el buceo y la pesca submarina que le procuraba los pescados que él mismo cocinaba a la brasa para sus amigos ejerciendo de anfitrión -otra cosa que le entusiasmaba- .
Gran lector de Ortega y Gasset y de Oscar Wilde evidenciaba su gran y especial sentido del humor que  compartía solo con los más allegados.
Y no sabemos nunca cuando nos va a llegar nuestra hora pero a él le ha llegado jugando con uno de sus hijos en la playa. Una buenísima manera de abandonar este mundo, a mi entender.

Se nos ha ido pronto, aún joven, pero  nos deja para siempre  los acordes desgarrados que fluían de  sus dedos como flores. Fuente y caudal.

jueves, 25 de septiembre de 2014

EL SABOR DE LOS RECUERDOS



Egipto; un país que con solo nombrarlo hace que el alma se estremezca. Nos evoca un mundo desconocido y exótico bajo cuyo influjo uno querría dejarlo todo e ir en pos de aventuras.

Recuerdo la primera vez que llegué a El Cairo, con 20 años, el corazón cargado de ilusiones y ese ansia de saber y conocerlo todo, gentes, cultura, arte, idioma y...gastronomía. ¡Todo era fascinante!

Pasear por típicas calles como el famoso Bazar de Jhana'l Jhalili, llenas, -entre un sinfín de productos- de puestos de frutas, hortalizas y especias supone todo un reto para los sentidos: el colorido te inunda los ojos, la algaravía de sus gentes, los oídos y los aromas...bueno, es difícil expresarlo con palabras pero se sienten en cada poro de la piel hasta casi embriagarte.
Día a día yo iba anotando palabras en un cuadernito y las transcribía en nuestras grafías y fonémas. Así aprendí lo poco que sé de árabe. Cuando íbamos a pueblecitos del Alto Egipto, al sur, como El Menya o  Zamalout, aún cuando no supiera el idioma. siempre lograba colarme en las precarias cocinas y "charlaba" con las mujeres intercambiando risas y recetas. Una palabra en árabe, otra en inglés o francés y sobre todo en el lenguaje gestual tan universal como útil, Sentadas en el suelo alrededor de una tarabesa, y fumando shisha  aprendía las artes culinarias y los métodos ancestrales de tratar los alimentos. Luego, saboreando el cordero  pensaba que, seguramente, sabría muy parecido al que en su día degustó Tutankamón; todo un lujo.

Siempre he pensado que lo que diferencia a las cocinas del mundo, lo que les imprime un sello de identidad son las especias. Y ahora me viene a la memoria una tienda  en Zamalout, muy antigua con un mostrador de madera que el tiempo había bruñido. Su propietario, Musa, ofertaba únicamente especias de todo Oriente, ordenadas en cajoncillos y frascos que llegaban al techo. Cominos, anís estellado, hinojo, pimienta, paprika, cilantro, cúrcuma, curry, azafrán, nuez moscada...Si cierro los ojos aún puedo sentir esa amalgama; aspirando colores, observando aromas. Todavía hoy conservo tarros de misteca (?) y hatbahán (cardamomo), y los uso. 

Hay momentos que permanecen en la memoria como tesoros y uno es el desayuno en Aesba't el Gamadir, el pueblo de la familia -y digo bien pues eran dueños de media proivincia-. Fuimos a visitar a la madre de mi entonces suegra. Era la anciana casi ciega y habitaba en la gran casona blanca que sobresalía entre el resto que eran de adobe. Tenía tres plantas con grandes terrazas y vistas a un caz del Nilo entre vergeles y palmerales.
Como en todos los pueblos del mundo se madrugaba mucho y así, antes de que Atón vertiera sus benditas luces doradas sobre la quietud de las aguas de Hapi, el padre Nilo, ya empezaba la actividad en la cocina y el corral.
Al poco tiempo, en la gran mesa del comedor, estaban dispuestos los manjares: leche de búfala, dulce y exquisita ordeñada el día anterior, cocida y enfriada. Queso rumi curado, queso beda blanco, cremoso y muy sabroso. Miel pura. Mantequilla. Pan de pita y grandes obleas crujientes. Huevos duros recién puestos que se comen con sal de comino. Encurtidos. Y , por supuesto, té, la primera taza negro y la segunda dulce y con yerbabuena. Aunque el desayuno popular es ful medammes, unas habas cocidas lentamente toda la noche y rehogadas con ajo, perejil ,cebolla y cominos. Se puede añadir limón o servir con huevos revueltos. Riquísimas.
También me acuerdo de cuando fuimos de excursión un domingo a las Pirámides. Tortilla de patatas, filetes empanados y pimientos fritos iban saliendo de la cesta -sabores de mi tierra, estos- y que, sentados sobre grandes piedras milenarias, engullíamos con fruición bajo la asombrada mirada de La Esfinje que pensaba que a estas alturas ya lo había visto todo.
Pasé veladas maravillosas y saboreé manjares exquisitos en los casinos, -restaurantes-barco -anclados a cada margen del río, cuyos farolillos de colores  se reflejaban en las aguas mientras  la orquesta tocaba sones típicos y una bailarina se contorsionaba al ritmo. Sitios para turistas donde  una noche, los músicos, al saberme española, se arrancaron por sevillanas -raras- que tuve que bailar como pude.

Muchos son los sabores y los recuerdos de ese querido país al que me siento tan unida.
Dice la leyenda que quien bebe agua del Nilo, vuelve a Egipto. Y, aunque yo he tenido la suerte de que se me haya cumplido en varias ocasiones, ya tengo ganas de volver. 
De momento rezaré a Osiris para que me haga  volver pronto y degustar kofta y kabab y molujheya y bamia y...y........
Amén.
Y para que vayáis abriendo boca, aquí os dejo la auténtica y famosa receta, de un menú completo que encontraron en el sarcófago de la reina Ty...(bueno vale, no es verdad pero quedaba muy bien) que, si seguís al pie de la letra hará las delicias de vuestros amigos. 

                    KOFTA DE CORDERO CON TAHINA 
Ingredientes*
1Kg. de carne de cordero picada
sal y pimienta
un bote de tahina de sésamo
una berenjena
zumo de limón
aceite de oliva
cominos molidos
pan de pita
ensaladita de lechuga, tomate y cebolla, picada fina y aderezada con aceite y zumo de limón.
*los productos que no haya habitualmente, tahina, cordero picado, una buena pita, etc... los encontraréis en comercios de alimentación árabes o cerca de alguna mezquita. 
Preparación
Salpimentamos la carne, la amasamos y formamos una especie de salchichas pequeñas (koftas)
Ponemos en una sartén grande un poco de agua y calentamos bien,
Añadimos las salchichas y movemos la sartén. hasta que se vayan cociendo y dorando. Reservamos.
En un bol mezclamos unas 4 cucharadas de pasta de sésamo con la berenjena cocida, pelada, escurrida y machacada. Salpimentamos y añadimos zumo de limón, aceite y comino molido removiendo bien.
Abrimos las pitas precalentadas rellenándolas con la ensaladita, 4 koftas y salseamos con la tahina.
Digno de Cleopatra, palabra.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

HOJA DE RUTA (de Merche y Jose). CANTABRIA



                                                             INTRODUCCIÓN

   
   Siempre he pensado que El Tiempo hace trampas; que su duración es inversamente proporcional a lo bien o mal que lo estemos pasando. De ahí que cuando sufrimos o esperamos algo con premura, se estire como si fuera de goma pero cuando estamos viviendo un buen rato  o de vacaciones parece que se pase en un pispás.  Para contrarrestar este efecto, yo le hago un poco de burla a Cronos  y, os aseguro que, si se hace bien, da resultados, por lo menos en cuanto a vacaciones cortas o escapadas se refiere.   
Todo empieza "antes de que empiece". Días antes de comenzar el viaje, Jose (con ilusión casi pueril), despliega sus mapas, guías, de la zona, folios y rotuladores, Bolígrafo en riestre va haciendo su hoja de ruta de cada día escudriñando meticulosamente el mapa, apuntando los lugares de interés*. Os aseguro que no hay iglesia románica, castillo o nacimiento de río  que pase por alto. En esto ya hemos sacado un poco de ventaja pues empezamos a disfrutar antes, planificando e imaginando lo bien que lo vamos a pasar.
Otra de las "burlas" consiste en ver muchas cosas en poco tiempo. Pero no a mata caballo, sino disfrutando  y asimilando todo lo que veamos, bebamos o comamos, respirando hondamente para atesorarlo en nuestra alma. 
Sacad fotos. Esto nos permitirá, a la vuelta, rememorar esos momentos y saborearlos de nuevo al editarlos y archivarlos en las nuevas  carpetas.
Pues estos son mis pequeños trucos para sacarle todo el partido a unas cortas vacaciones. Espero que toméis nota y os sea útil.

*Esto no quita para que, de vez en cuando, nos encante ir a la aventura y descubrir muchas veces cosas y parajes asombrosos.

                                                           CANTABRIA OCCIDENTAL

Cuando pronuncio "Santander" el corazón me da un vuelco de alegría ya que la mitad le pertenece como veréis más adelante.
Tras muchos años, hemos vuelto. Esta vez elegimos ir por la N-623, por el famoso Puerto del Escudo, al que recuerdo cuando iba de muy pequeña con mi familia; mi padre, mi madre, mis dos hermanas, algún amigo y yo, con un equipaje para pasar un larguísimo verano de dos o tres meses... en un 600!! La verdad es que no sé como podíamos ir por aquella carretera, a veces de noche y con niebla o detrás de un camión a velocidad desesperante.
Antes de llegar al Puerto pasamos por Orbaneja del Castillo que tiene un mirador en la carretera y es un paraje curioso al estar rodeado por montañas que asemejan murallas medievales con almenas y todo, También en el pueblo hay un castillito como su nombre indica. Continuamos para ver la Colegiata de San Martín de Elines. Alta y esbelta se eleva ante nuestros ojos pero cuando fuimos a entrar...oh, vaya; cerrada a cal y canto. El motivo fue que se iba a celebrar una boda y estaba llena de flores. Si os animáis a ir, llamad antes e informaros de que no haya previsto ningún enlace.
Pasado El Escudo, ya si, nos dirigimos a nuestro primer gran destino: Liencres. Aquí vamos a pasar los primeros tres días de los 10 que tenemos de vacaciones. Nos alojaremos en Somocuevas, un barrio llenos de chalets en un entorno precioso, cuyo paisaje son calas rocosas, hierba y gaviotas. Nosotros alquilamos una habitaciíon y un baño privado en la planta de arriba de un moderno chalecito. Tanto la dueña, Maru, como su madre son encantadoras.
Después de comer y dar una vuelta por el pueblo nos fuimos a tomar un gintónic a la playa de Valdearenas, dentro del Parque Natural Dunas de Liencres
El 2º día nos fuimos a Santander que está a tan solo 9 km, Soleado y preciosos nos encontramos Puerto Chico vestido de gala, con una Feria Gastronómica llena de jaimas con sus productos de la tierruca y  barecitos que ofertaban pinchos y cervezas.
El ambiente era estupendo, Aconsejamos a todo aquel que vaya por allí un viaje en barco de una hora de duración por toda la bahía y que rodea la Isla de Mouro y el Faro de Cabo Mayor. La visita desde la ciudad desde el mar es una pasada. Tuvimos la suerte de ver un sinfín de veleritos de clores practicando para la Competición Internacional que se celebraría a los pocos días, El Ferry que se dirige regularmente al puerto de Southampton pasó a unos pocos metros de nuestra barca. Qué impresión, parecía El Titánic!!
Muy recomendable es tomar unos caracolillos y un buen vermú de grifo en Solórzano, legendario bar en la calle Peña Herbosa, 17.
El día 3º lo dedicamos exclusivamente disfrutar de  El Sardinero. ¿qué puedo decir?, amigos, no hay palabras para describir lo que sentí. Tuve una extraña sensación, como si me observara a mí misma en el pasado.  Os aseguro que no hay un centímetro de esa playa en que no tenga un recuerdo, Fue ahí donde aprendí a andar, a nadar y a besar, como aquel que dice, Pero eso es otra historia, jaja.
Os aconsejo ir andando desde Santander  por el sin igual Paseo de Reina Victoria,  hasta llegar a El Sardinero, y dejar  que se nos muestre regio, en todo su esplendor; El Casino, El Hotel Real, El Maria Isabel y su 1ª y 2ª playas. Los preciosos Jardines de Piquío, donde tanto jugué, El Paseo de Los Castros, San Roque, El Auditorium, pequeño escenario en forma de concha donde pasé muchas tardes viendo guiñol y comiendo regaliz, y, a su lado, en un rincón, minúscula y tímida se muestra La Fuente de Cacho, si, la que canta la afición de El Racing CF; "...Voy a la fuente de Cacho a beber un poco de agua que me han dicho que es muy buena beberla por la mañana, dimé, dónde vas morena dimé dónde vas salada"
Resumen del día: Playa, Sol. Rabas en el Miramar y gintónic en el Lisboa.
Abandonamos Santander y Liencres con tristeza para dirigirnos con ilisión a nuestro próximo destino, Oreña.
                                                                
4º día. En algo más de media hora recorrimos los escasos 30 km. que separan Liencres de Oreña que elegimos por estar casi pegado a Santillana y Altamira.
Aquí habíamos reservado una habitación en una casa rural muy bonita y tranquila; La Posada de San Pedro, una Casona de piedra con muchas flores en el barrio de Bárcena. Cuatro largos días nos esperaban, De momento nos recibieron con una botella de cava brut helado que nos reservamos para la noche.
Oreña tiene unos  acantilados desde los que se contempla el Cantábrico agitarse cuando está intranquilo. Toda una terapia para templar nuestros nervios. Yo me pasaría horas observándolo.
A los amantes de  cuevas  muy cerca, en el barrio de Perelada se encuentran la de Cualventi que tiene restos prehistóricos y  fueron habitadas hasta la Edad Media,
La Iglesia de San Pedro del s. XVI está en el centro del pueblo. Y la joya del lugar está en el barrio de Caborredondo, la Ermita de San Bartolomé, prerrománica del s IX y que se puede visitar pidiendo la llave a una vecina de la casa de enfrente que te la muestra amablemente.

Para del 5º día teníamos programado una excursión a Suances. Tras un desayuno a base de zumo natural, café o té y unos deliciosos bollos recién horneados por la dueña, nos pusimos en camino. Llegamos   en un periquete ya que está a unos 10 km. Está al este de Santillana y su paisaje te deja  boquiabierto por su belleza en la desembocadura de los rios Saja y Besaya y por sus playas, De las cinco que tiene, destacan, la de La Concha que es una bahía acogedora, antiguo balneario de veraneantes, Pero sobre todo...la de Los Locos, Nunca he visto playa igual. Se accede por un buen tramo de escalones de piedra (unos ciento y pico) pero tiene una extensión de césped verdísimo y aterciopelado con sus duchas donde la gente toma el sol sobre sus toallas multicolores, A mitad de la cuesta hay un chiringuito-restaurante resguardado con toldos y  desde cuyas mesas de madera puedes degustar una cerveza disfrutando de unas vistas únicas. Si continúas las escalera hasta el final (nosotros nos quedamos en el chiringo) llegas a una inmensa playa de arena fina y rocas donde jóvenes surferos cabalgan espumosas olas, los niños juegan a sus anchas y mayores toman el sol con la agradable brisa. Arriba , entre estas dos playas, se puede pasear por la montaña hasta llegar a un mirador con forma de pequeño anfiteatro para descansar. Allí saboreamos un exquisito bocadillo de anchoas de Santoña y tomate natural. Si La Gloria existe debe de ser algo muy parecido.
Para quemar las calorías ingeridas seguimos paseando por una senda abrupta de aquel monte asalvajado todo camino de cabras y altibajos. A muy escasos metros, abajo, la mar imponente. Caminamos hasta llegar a un acantilado que forma un entrante de aguas a modo de bufador donde abajo culminan y entran las olas para volver a salir en un vaivén hipnótico. La verdad es que faltan las palabras para describirlo. Respiré todo lo hondo que pude mientras Jose trepaba e inspeccionaba el terreno. Sacando fotos descubrí enfrente a un joven que colgaba casi al vacío cogiendo lo que pudieran ser fósiles a golpe de martillito. Se la estaba jugando. En fin...
Merecidos refrigerios a pie de playa y vuelta a Oreña. Cena, cava y caer rendidos fue todo   uno.

Día 6º, Cuevas de Altamira, La "Neo-cueva" está muy bien reproducida pero siempre hay una vocecilla aguda y risueña en mi oreja  que me dice  "son de mentira, son de mentira". (Hay un día a la semana en que se sortean cinco afortunados entre todas las entradas para visitar las auténticas. Ese día era mañana. así pues, al día siguiente  el pobre Josito se levantó a las 7 y fue a probar suerte aunque se volvió desilusionado al ver dos autocares y muchísimos coches. Qué pena!!)
Santillana del Mar, la de las tres mentiras, pues no es santa, ni llana  ni tiene mar, es visita obligada para los amantes lo bello, Hay que perderse por sus callejuelas empedradas y entrar en sus tiendas de productos típicos y recuerdos. la Colegiata es magnífica y tiene un claustro espectacular. Los capiteles de sus columnas son todos distintos y representan interesantes escenas sobre el bien contra el mal.
Solo hay dos lugares con dos Paradores, a saber, Sto, Domingo de la Calzada y Santillana del Mar. El Gil Blas es un sitio óptimo para tomar un vermú sin prisa . Santillana tiene una amplia oferta gastronómica y nosotros elegimos un Restaurante con las mesas dispuestas en un gran patio. Con mis pies hechos trizas por el bonito empedrado histórico- artístico volvimos a La Casona. ¡Qué agradable sensación entrar en la habitación tan limpia y arreglada después un día bien pateado!! Tras una ducha caliente, cena con velitas en la habitación: cava helado, la mejor cecina que he probado, anchoas y queso. A dormir!!

7º día. En el campo de batalla Belondios y Golbardos luchaban encarnizadamente cuando una musiquilla lejana fue subiendo de tono hasta que  la reconocí: el maldito despertador. Qué pronto se pasa la noche (todo un clásico cortesía del sr. Tiempo). Al contale mi sueño a Jose, se rió a carcajadas diciendo que Belondio era un río  y Golbardo, un pueblo  por los que habíamos pasado. Lo que hace el subconsciente! Tras otro desayuno en el acogedor comedorcito pusimos rumbo a  Castañeda por su Colegiata. A Galizano por su playa a la que, a veces, íbamos de excursión con mis cintas de Serrat. A Cabo de Ajo, para ver su faro, aunque no se puede ver pues está cerrado a cal y canto con un cartel de "Prohibido". A  Bareyo por su iglesia románica y, por último a  Santoña...por sus anchoas, Tiene esta un bonito paseo marítimo donde pasean tranquilas las familias y las parejas. Sobre una gran alfombra de césped se ubican unas tumbonas de piedra de lo más cómodo para ver los barcos que llegan al final de la tarde en un ambiente diáfano y como sin prisa. También se alinean en paralelo al paseo terrazas donde refrescar el gaznate (aún a costa de que "te claven" bien).
Sé que parecen muchos sitios para un solo día pero, por suerte, están muy juntos y eso facilita mucho las cosas.
Y para redondear el día acudimos a la reserva de una cena romántica, cortesía de nuestros vástaguers en  la Casona Rural Camino de Hoz en Anero: ensalada de anchoas, parrillada de verduras y chuletón a la brasa. ¡Cómo cansan las vacaciones!

8º día. Llegamos a Comillas sobre las 11 y aparcamos cerca del faro donde dimos una vuelta por el pequeño puerto y tomamos una cerveza frente al mar. Luego nos dirigimos al centro. El vermú sabe diferente en esa plaza llena de flores. Nos montamos en el trenecito turístico que nos dió una idéa de qué visitar. Después de comer empezaba el trote. El Palacio de Sobrellano lo mandó construir Antonio López López, un acaudalado vecino dueño de astilleros que envíó barcos para la guerra de Cuba, a lo que el rey agradeció nombrándole Marqués de Comillas. Su arquitecto, Joan Martorell lo terminó en 1888. Gaudí intervino también realizando algunos muebles. Es de estilo neogótico y en su interior me llamaron la atención las chimeneas de cada salón y los artesonados.
A continuación, El Capricho, un palacio modernista que Máximo Díaz de Quijano, concuñado del Marqués de Comillas encargó a Gaudí. Es de corte orientalista con un alminar. Está forrado en su exterior por azulejos de girasoles ya que en esta planta pensó Gaudí para darle sentido al palacio: Quería que el sol iluminara cada estancia en el momento en que se usa, Por ejemplo, los dormitorios orientados al este, el comedor al mediodía y a poniente las salas. Como Quijano era amante de la música, incluyó elementos relacionados, como claves de sol en el tejado, vidrieras con un pájaro tocando el piano o una abeja tocando la guitarra, Hasta una ventana musical!! Destacan su mezcla de estilos, sus balcones-banco  y sus ricos artesonados. El palacio gira en torno a un invernadero del gusto de la época. Lo concluyó en 1885. Podría estar horas hablando de este genio y su obra, pero no es el momento. Solo diré que el pobre señor Quijano lo disfruto 7 días antes de su muerte, Ainsss!!
El Capricho fue restaurante durante muchos años hasta que la Comunidad de Cantabria no pudo afrontar su mantenimiento y se lo vendió a un grupo japonés que lo tiene como museo y para celebrar eventos.
Como cabe esperar nos recogimos temprano Jose, yo y mis pies.

Día 9º. Rumbo a Fuente De!! Salimos temprano parando en Puente Nansa que estaba en fiestas donde tomamos unas patatas "sin chorizo" y yo sin cobertura. Pero antes nos dirigimos a
Las Cuevas de El Soplao, en Rionansa, parada obligatoria. Están consideradas únicas en el mundo por sus formaciones geológicas de estalactitas, estalagmitas, abundantísimas excéntricas y grandes coladas. Se accede en un vagón de tren de la antigua mina y el espectáculo es prodigioso, diríase que nos hallábamos en un planeta ignoto o en una novela de Verne. De sus 20 km., solo 4 se pueden visitar. Es una experiencia única.
Llegamos a mi querido Potes por la temprana tarde. Es un pueblo en el que me encuentro muy a gusto; sus tiendas de suvernirs en la calle soportalada. esa callejuela empedrada con restaurantes cuyas terrazas cuelgan del otro lado, mirando hacia el rio y su puente. Sus establecimientos que exhiben a la puerta productos típicos, quesos, licores, duces...Es un placer recorrerlo sin prisa. No puede faltar la visita al Monasterio de Liébana y su Beato. Hacia el fondo del paraje hay un manantial muy bonito y arriba del todo una pequeña ermita con una vista muy agradable.
En el valle de Los Picos de Europa se posa El Parador de Fuente De, uno de nuestros favoritos por su el enclave privilegiado. Abrir las ventanas de la habitación y ver un prado verdérrimo del que emerge esa montaña, que a penas si logras ver entera estirando el cuello, es algo excepcoional. También podemos observar el trasiego del teleférico cuya estación está a pocos metros del Parador.
No importa las veces que suba a la cima, siempre experimento la misma sensación; uno se siente pequeño ante tanta grandeza, Hay veces que La Naturaleza nos sobrepasa y nos empequeñece. Respiremos profundamente, inhalemos algo de esa enormidad y hagámosla nuestra durante unos instantes, sintiéndonos parte de ella.

Jose la goza compartiendo un bocadillo de chorizo con los cuervos, que, encantados revolotean a su alrededor y comen de su mano o "cazan" las migas al vuelo. Niños y mayores se arremolinan para ver tan raro espectáculo y, atónitos le sacan fotos. Tal vez deberíamos plantarnos seriamente dejarlo todo y mudarnos a lo alto de Peña Remoña para crear un circo,
Rica cena en el Parador y a disfrutar el poco tiempo que ya nos queda.
Al día siguiente, día 10º, tras el desayuno y unas últimas fotos abandonamos nuestra querida montaña y comenzamos la vuelta. Pero....negándonos a terminar nuestras vacaciones decidimos parar a tomar el vermú y a comer en nuestro también querido Parador de Cervera de Pisuerga. Nos pillaba de camino y creímos que era una buena manera de concluir nuestro periplo.
Amigos, lo decíamos al principio, todo lo bueno se acaba pero, no me negaréis que le hemos sacado un buen partido a estos 9 días y que Cronos estará un poco contrariado de que,,,una vez más lo hayamos logrado. Carretera y manta.
Ahora...a pensar en la siguiente escapada, (ya queda menos)